Ayudas públicas a la extensión de la banda ancha

Con las ayudas públicas a la extensión de la banda ancha se persigue aumentar el ritmo de extensión y el alcance de la cobertura de las redes de banda ancha de última generación, corrigiendo fallos de mercado o resultados insatisfactorios desde el punto de vista de la cohesión territorial, minimizando la distorsión de la competencia y respetando el principio de la neutralidad tecnológica.

La Comisión Europea (CE) tiene encomendada la vigilancia de la compatibilidad de las ayudas públicas con el mercado interior. En relación con su aplicación a la banda ancha, la CE aprobó las Directrices de la Unión Europea para la aplicación de las normas sobre ayudas estatales para el despliegue rápido de redes de banda ancha (2013/C 25/01), en las que se resumen los principios de la política de la Comisión en materia de aplicación de las normas sobre ayudas estatales del Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea a las medidas que apoyan el despliegue de redes de banda ancha en general y explican la aplicación de estos principios al evaluar dichas medidas de apoyo.

En la actualidad, España tiene una de los mayores porcentajes de cobertura de banda ancha ultrarrápida de los países de nuestro entorno, tal como se pueden consultar en los últimos informes sobre la cobertura de banda ancha.

Con el objetivo de alcanzar una cobertura total a más de 100 Mbps en 2025, el Gobierno de España ha venido realizando diversas actuaciones para favorecer la extensión de la banda ancha a la totalidad de los ciudadanos y empresas a través del Programa Nacional de Extensión de la Banda Ancha de Nueva Generación (PEBA-NGA).

En 2021 se ha diseñado y puesto en marcha el Programa de Universalización de Infraestructuras Digitales para la Cohesión – Banda Ancha (ÚNICO-Banda Ancha), que coge el relevo del anterior para constituirse en el vector de la vertebración territorial y cohesión social, sirviendo de marco para otras actuaciones con las que se completará la universalización del acceso a la banda ancha ultra rápida en todo el territorio permitiendo así mejorar la funcionalidad y la calidad de los servicios digitales necesarios para la completa transformación digital y con ello aumentar el bienestar y la calidad de vida de los ciudadanos, contribuyendo al éxito de un modelo de crecimiento sostenible e inclusivo basado en la sociedad del Gigabit.